martes, 22 de octubre de 2013

uno es, y el otro también




                                  

Una casita para los dos. 
Que tu ventana sea la misma que la mía, 
y que los suelos que pisen tus pies, también. 
Que la mesa sea la misma en la cual nos apoyemos, 
que sea el mismo espejo en cual nos miremos. 
Que las cucharitas del té sean tuyas y mías, 
y así también las plantas del jardín. 
Que todo lo de fuera sea de los dos 
y cada uno sea uno, 
para compartir con el otro, 
lo que cada uno es.