domingo, 17 de marzo de 2013

ellos no quieren


La luz del techo se vuelve demasiado amarilla. A través de los huecos de la horrible cortina de encaje, veo que los árboles flamean agresivamente. El cielo es gris. Muy gris. La ciudad parece ansiosa por hacer que llegue la noche. La gente se sienta a cenar. La gente se sienta a leer. Algunos sólo miran la TV. Algunos hermanitos se pelean y luego lloran angustiados. Tienen la panza llena de golosinas, y están malhumorados. Los cachetes colorados, eufóricos. Y su madre les grita que por favor se metan ya a la bañera, que se tienen que ir a dormir. Ellos no quieren, porque mañana es sábado.